Producir sus propios datos ayudó a los 5 movimientos y grupos a registrar, medir, analizar y visibilizar sus problemas. La investigación fortaleció las luchas de los movimientos por la justicia de varias maneras. En primer lugar, involucrando a personas de diferentes comunidades en la identificación de los impactos de los actores corporativos. El proceso de investigación fue una forma de ejercer sus derechos de información, consulta y autodeterminación, y de contrastar mentiras y desinformación por parte de actores corporativos. Entre 30 y 900 miembros de las comunidades en todos los lugares de investigación tuvieron la posibilidad de explorar cómo los actores corporativos controlan los procesos democráticos de toma de decisiones y el impacto que esto conlleva en sus vidas. “El trabajo de la Red-DESC sobre la captura corporativa nos motivó porque cuando nos involucramos en el proceso de investigación, el hecho de mirar a través de la lente de la captura corporativa fue muy poderoso y proporcionó un marco muy bueno. Dio confianza a las personas de la comunidad porque pueden nombrar el problema”, dijo Herman Kumara de NAFSO, Sri Lanka. “Decidimos enfrentar la captura corporativa extrayendo la información de los archivos históricos, con lo cual pudimos verificar los derechos territoriales de la comunidad y la ilegalidad de las operaciones mineras. Tener la documentación lo más ordenada posible es la única forma de romper esta situación de confusión, miedo y explotación”, declaró Elizabeth Cuenca de la Red Chimpu. En segundo lugar, la recopilación de evidencia de los impactos destructivos de los actores corporativos en las comunidades y el medio ambiente permitió a los movimientos articular mejor las demandas colectivas por justicia. La investigación expone cómo la influencia de los actores corporativos en la toma de decisiones locales -muy a menudo impuesta a través de la violencia y el miedo- conduce a la pérdida de los medios de vida y formas de vida tradicionales, al acaparamiento de tierra y la pérdida de tierras, agua y contaminación del suelo, entre otros. En el caso de los territorios de los Pueblos Indígenas, la violación del derecho al Consentimiento Libre, Previo e Informado se identifica como el inicio de una serie de violaciones a otros derechos. Así, desde Guatemala, la investigación del Consejo de Pueblos Wuxhtaj encontró que “las empresas hidroeléctricas utilizan diferentes prácticas de engaño, desarticulación del tejido social, criminalización y violencia para imponer proyectos en territorios donde viven ancestralmente los pueblos mayas, los cuales han sido marginados y excluidos de las políticas sociales y de desarrollo económico”. En general, las mujeres se enfrentan a impactos desproporcionados de las violaciones a los derechos humanos, y estas generalmente no se reflejan en los datos existentes. A través de encuestas, grupos focales y entrevistas, la Plataforma de Afectados por la Hipoteca en España constató que existe una preocupante desigualdad de género en la protección del derecho a una vivienda digna y a los suministros básicos y que las mujeres, en particular las que son jefes de familia, mayores y migrantes, son las más afectadas por los desalojos y no pueden costear los suministros básicos. A pesar de los contextos políticos adversos y los riesgos de seguridad causados por los gobiernos locales y las empresas durante el proceso de investigación, el proyecto destacó la capacidad de las comunidades y organizaciones para recopilar datos, analizar y contar sus propias historias de manera efectiva, inclusiva, objetiva y horizontal. La narración colectiva ha permitido visibilizar la memoria compartida y la identidad de los movimientos en relación con la defensa de los territorios y los recursos naturales, lo cual es fundamental para amplificar las luchas de los movimientos. Como lo expresó el miembro del Grupo Asesor Oscar Pineda (PODER, México): "Esta iniciativa nos demostró que los movimientos sociales pueden desarrollar capacidades para recopilar datos y construir narrativas sólidas que contrarresten el poder mediático de empresas y gobiernos que buscan despojarlos de sus recursos naturales y territorios”. |